El alero de Utah Jazz, Gordon Hayward, podría cambiar de aires este próximo verano, cuando se convierta en agente libre restringido, lo que quiere decir que su equipo actual, tendrá la oportunidad de igualar la oferta que reciba el jugador y quedarse con él.
Pero según pasa el tiempo todo parece apuntar a que los de Salt Lake City no tienen intención de igualar nada, tras haber perdido la confianza puesta a principios de temporada sobre el joven jugador de 24 años, esperando que liderara la reconstrucción de un equipo joven y con mucho futuro, pero pese a sus buenos números, no se ha visto en él el liderazgo que necesitan.A pesar de haber firmado su mejor temporada en la liga y de mejorar sus números año tras año, los dirigentes de la franquicia no parecen estar convencidos de que Hayward sea la pieza fundamental entorno a la que quieren que gire el equipo.
Sus números en la presente campaña han sido buenos, pero eso no es un indicador de que todo vaya bien, el ejemplo perfecto ha estado en los números de jugadores de los Kings y de los Lakers, ya que en un equipo que va mal, la gente no se compromete igual, y solo se dedican a hacer números, aunque no sean un gran jugador para un equipo. Sus números este año, como decia increíbles para su corta edad, que pueden deparar grandes cosas: 16.2 puntos, 5.1 rebotes, 5.2 asistencias, 1.4 robos y 0.5 tapones, jugando 36.4 minutos por encuentro, y un porcentaje de acierto del 41.3 en tiros de campo.
La situación actual de Hayward ha llegado a oídos de los Boston Celtics, un equipo en reconstrucción a quién le vendría muy buen un jugador de su corte, y más si se quieren deshacer de Jeff Green; y es que, Brad Stevens, entrenador de los Celtics, conoce muy bien al alero de los Jazz, ya que le entrenó durante su etapa universitaria en la 'Universidad de Butler', y con el que mantiene una gran relación. Otros equipo, como es el caso de los Suns, también están interesados en adquirir al jugador, pero lo cierto es que el entrenador de Celtics podría ser el factor determinante en su elección, aunque es cierto, que como todo joven querrá ir a un equipo ganador.
En cuanto a su salario, en la presente campaña ha cobrado 3.45 millones de dólares, y sus aspiraciones son, en primer lugar un contrato multianual, y en segundo lugar, que al menos de unos 7 millones por año.
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